La definición de violencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) es el uso intencional de la fuerza o poder físico, de hecho o como amenaza, contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones.
La violencia física es la más evidente porque el daño producido se marca en el cuerpo de la víctima. Existe la violencia psicológica, que produce daño en la esfera emocional. La violencia sexual en donde encontramos la violación, o los tocamientos y realizar prácticas sexuales que no se desean.
En la actualidad tenemos al bullying que es el hostigamiento escolar, el maltrato físico, verbal o psicológico, producido entre escolares en forma reiterada, a lo largo de un tiempo determinado. El agresor somete a la víctima a menudo con el silencio, la indiferencia o la complicidad de sus compañeros. O el sexting, que se refiere al envío de contenidos eróticos o pornográficos por medio de teléfonos móviles.
La violencia durante el noviazgo es más frecuente de lo que se imagina, se trata de una dificultad más a superar y la mejor forma de combatirla es frenarla desde el inicio. La violencia comienza haciendo su tímida aparición primero y posteriormente se adueña de algunas relaciones durante años.