El 27 de enero de cada año se celebra el día del nutriólogo, fecha creada por la Asociación Mexicana de Nutriología (AMN), ya que ese día fue el que la Asociación se registró ante la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, por lo cual la Directiva de la AMN, acordó que en esa fecha se celebraría el Día del Nutriólogo. |
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en México existe un déficit de especialistas en nutrición ya que existen un promedio de 2.4 nutriólogos por cada mil habitantes. Factor que junto con la pobreza extrema principalmente en el sur del país, el encarecimiento de los productos básicos, la falta de actividad física, la proliferación de alimentos chatarra, entre otros influyen en los malos hábitos alimenticios del mexicano, pues carece de la orientación y necesaria para llevar una dieta equilibrada.
Asistir al nutriólogo no sólo implica obtener una dieta para mantener un cuerpo delgado, es además, aprender a llevar una alimentación saludable para poder mejorar los hábitos de alimentación, evitando así las diferentes enfermedades que la mala alimentación produce. Convirtiendo la visita al nutriólogo en una necesidad para de ésta manera mantenerse saludables, mejorando la calidad de vida, lejos de ser un lujo estético.
El 27 de enero de cada año se celebra el día del nutriólogo, fecha creada por la Asociación Mexicana de Nutriología (AMN), ya que ese día fue el que la Asociación se registró ante la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, por lo cual la Directiva de la AMN, acordó que en esa fecha se celebraría el Día del Nutriólogo.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en México existe un déficit de especialistas en nutrición ya que existen un promedio de 2.4 nutriólogos por cada mil habitantes. Factor que junto con la pobreza extrema principalmente en el sur del país, el encarecimiento de los productos básicos, la falta de actividad física, la proliferación de alimentos chatarra, entre otros influyen en los malos hábitos alimenticios del mexicano, pues carece de la orientación y necesaria para llevar una dieta equilibrada.
Asistir al nutriólogo no sólo implica obtener una dieta para mantener un cuerpo delgado, es además, aprender a llevar una alimentación saludable para poder mejorar los hábitos de alimentación, evitando así las diferentes enfermedades que la mala alimentación produce. Convirtiendo la visita al nutriólogo en una necesidad para de ésta manera mantenerse saludables, mejorando la calidad de vida, lejos de ser un lujo estético.
Panorama epidemiológico mundial
La actual epidemia global de sobrepeso y obesidad está convirtiéndose en un gran problema de salud pública a nivel mundial. Otro problema con el que algunos países en desarrollo coexisten, es la desnutrición. El incremento de la prevalencia de sobrepeso y obesidad está relacionado con algunas enfermedades crónicas, como son diabetes mellitus, hipertensión, enfermedad cardiovascular y algunos tipos de cáncer.
No hace mucho tiempo los ricos eran obesos, los pobres eran delgados y la preocupación era cómo alimentar a los desnutridos. Actualmente, los ricos son delgados y los pobres son, además de desnutridos, obesos y la preocupación es ahora la obesidad.
En ese sentido, es vital encontrar formas adecuadas de producción de alimentos que en cantidad y calidad provean una dieta balanceada y equilibrada y cuya distribución sea equitativa a todos los seres humanos. Y, si esto ya se considera un reto, lo es más aún, puesto que estas actividades deben realizarse mediante prácticas ambientales responsables.
Para hacer frente a la malnutrición son precisas medidas integradas e intervenciones complementarias en la agricultura y el sistema alimentario, en la ordenación de los recursos naturales, en la sanidad pública y la educación, así como en ámbitos de políticas más amplios.
Hoy en día cerca de 870 millones de personas en el mundo sufren desnutrición crónica y cada año fallecen por lo menos 2,8 millones de personas adultas como consecuencia del sobrepeso o la obesidad. Hasta ahora, los esfuerzos mundiales no han bastado para alcanzar el objetivo de la Cumbre Mundial sobre la Alimentación, reducir a la mitad el número de hambrientos para el año 2015.
La alimentación en México
¿Qué es la alimentación?
La alimentación definida como el “conjunto de procesos biológicos, psicológicos y sociológicos que se relacionan con la ingestión de alimentos mediante el cual el organismo obtiene del medio los nutrimentos que necesita, así como las satisfacciones intelectuales, emocionales, estéticas y socioculturales que son indispensables para la vida humana plena” (NOM-043-SSA2-2012), esta define el estado de salud de la población, ya sea por llevar una buena o mala alimentación.
En México, el sobrepeso y obesidad se han vuelto un tema de gran importancia en los últimos años debido a su notable aumento entre el año 2006 y 2012. La prevalencia de sobrepeso y obesidad en niños menores de 5 años incremento de 7.8% a 9.7% de 1988 a 2012. El 35 % de los adolescentes de entre 12 y 19 años de edad padece sobrepeso u obesidad, lo que indica que más de uno de cada 5 adolescentes tiene sobrepeso y 1 de cada 10 sufre obesidad, siendo más frecuente el sobrepeso en mujeres con un 23.7% y en hombre 19.6%. Por otro lado la obesidad en hombres es mayor, el 14.5% la padecen en comparación con el 12.1% de mujeres.
Según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en un comunicado emitido el 20 de diciembre de 2013, 1.5 millones de niñas y niños menores de 5 años padecen desnutrición crónica en México. 21.2 millones de niñas y niños viven en pobreza. Además la anemia que hay en México es mayor a la anemia que se padece en África. Al mismo tiempo en el país, 27.4 millones de personas tienen carencia por acceso a la alimentación, mientras 7.4 millones viven en pobreza extrema y carencia alimentaria severa.
La nutrición en Puebla
De acuerdo a la ENSANUT 2012, en Puebla la prevalencia de sobrepeso y obesidad para menores de cinco años fue de 8.3%, en niños de 5 a 11 años la prevalencia fue de 29.2% y en adolescentes de 36.3%.
En la población mayor de 20 se observa que la prevalencia de sobrepeso y obesidad en el Estado, fue de 71.1% en hombres y de 74.5% en mujeres, lo que ubica a los hombres y mujeres de Puebla , por encima de la media nacional , la cual corresponde a 66% y 72% respectivamente.
Actualmente en los Servicios de Salud se atienden a 20,241 pacientes con obesidad, de los cuales solo el 25.3% se encuentran en control.
En lo que respecta a la Diabetes Mellitus , la prevalencia por diagnóstico médico previo en personas de 20 años o más en Puebla de acuerdo a la ENSANUT 2012 fue de 8.4%, 2.1% más que en 2006 (6.3%).
Por otro lado la prevalencia de anemia en niños de 1 a 4 años de edad en Puebla en 2012 fue de 20.0%, que representó a 96 074 niños anémicos, menos que en 2006 (30.9%), siendo la prevalencia nacional de anemia para este grupo de edad de 23.3%. En niños en edad escolar, 8.6% sufrió anemia, que representó 78 641 niños anémicos, la prevalencia nacional de anemia para este grupo de edad fue de 10.1%. El 2.6% de los adolescentes presento anemia, lo cual representa a 25 985 adolescentes anémicos, siendo la prevalencia nacional de anemia para este grupo de edad de 5.6%.
Importancia y participación del Nutriólogo
Actualmente el panorama de la nutrición y la alimentación en México se ha vuelto muy complejo por lo que es necesario integrar expertos que encaminen a la población a tomar mejores decisiones en materia de alimentación, con la finalidad de mejorar la salud y por ende la calidad de vida, siendo el o la nutrióloga el trabajador de la salud indicado para realizar este trabajo.
El estilo de vida de las personas evoluciona constantemente y esto influye en su alimentación. La alimentación se lleva a cabo mediante procesos fisiológicos, pero se debe tomar en cuenta que la alimentación también se relaciona con factores sociales, psicológicos, económicos, religiosos y culturales.
Hoy en día la globalización tiene una gran influencia en los hábitos de alimentación, siendo éstos el resultado de los cambios sociales, familiares, cambio de roles, la estructura familiar, las mujeres trabajando fuera del hogar, cambio demográfico, tipo de economía, la migración, entre otras. Esto provoca que las nuevas generaciones crezcan en ambientes que no son favorables para ellos.
Los hábitos de alimentación son considerablemente condicionantes por la disponibilidad de los alimentos y la posibilidad y estabilidad económica, además la sociedad es fuertemente influenciada por los conocimientos sobre los beneficios de la buena alimentación lo que se traduce en un cambio en la elección de los alimentos.
Para el hombre y para la mujer de hoy en día, el hecho alimentario es un continuo conflicto que se puede resumir con una simple cuestión: ¿Qué debemos comer? Frente al dilema entran en juego los mensajes externos que aportan tanto la cultura y la tradición (fruto de la experiencia ajena) como la propia experiencia. De la misma manera tiene acceso a más información por diferentes medios, recibe mensajes con los que son bombardeados sobre diferentes temas y recomendaciones, muchas veces encaminados, no a mejorar la salud de la población, si no a generar mayores ingresos para las empresas. Además, estamos en un momento en el que comer se concibe como una fuente de placer. Este placer también lo relacionamos con actos de sociabilización como son las comidas de negocios o los eventos familiares. En estas ocasiones, la comida no responde a una necesidad física si no al mero deleite.
Por estas razones es importante que la población cuente con un experto en la materia de nutrición, para que logre generar conocimientos confiables del tema y los guíe a tomar decisiones basadas en conocimientos reales encaminados a mejorar la calidad de vida por medio de hábitos de alimentación saludables, actividad física, consumo de agua simple potable, prácticas de lactancia materna, entre otras.
Así pues, comprender el hecho alimentario es muy complicado. Es necesario buscar un equilibrio entre lo que tenemos a nuestro alcance y las necesidades fisiológicas. Este equilibrio es imprescindible ya que la población, pese a ser cada día más sedentaria, no es proclive a modificar los aportes energéticos. Actualmente una de las principales preocupaciones de la salud pública son las enfermedades nutricionales. Es necesario, pues, insistir en una correcta educación alimentario-nutricional.
El nutriólogo, es además el responsable de encaminar a la población en las diferentes etapas de la vida, durante el embarazo, la infancia, la adolescencia, la edad adulta, la tercera edad, en las diferentes enfermedades y durante la práctica de algún deporte; además el nutriólogo es el responsable de evaluar el estado nutricio a lo largo de todas estas etapas de vida. Durante todas estas etapas es de suma importancia llevar unos adecuados hábitos de alimentación ya que esto es determinante para a lo largo de toda la vida mantener un buen estado de salud.
Durante el embarazo es de vital importancia tanto para ella misma como para el bebé en gestación llevar buenos hábitos de alimentación, así como contar con una evaluación del estado nutricio con el fin de mejorar las condiciones del embarazo y el puerperio y lograr detectar tempranamente posibles problemas para así ser mejorados e impactar positivamente en el estado nutricional de la mujer y el niño. Un inadecuado estado nutricional, tanto preconcepciones como durante el embarazo, impactará de forma negativa sobre el desarrollo del embarazo y sobre la salud de la madre y el niño. Por otro lado, una correcta alimentación contribuirá a disminuir el riesgo de bajo peso al nacer, prematurez, inadecuaciones nutricionales de la madre y el feto, etc.
Así mismo durante la edad escolar una alimentación correcta permite al niño crecer con salud, evitar las enfermedades y mantener sus exigencias escolares y estar físicamente activos. También necesitan conocimientos y habilidades para escoger opciones alimentarias correctas. A través de actividades como huertos escolares, almuerzos escolares y educación alimentaria y nutricional para desarrollar hábitos que los ayuden a mantenerse sanos a lo largo de sus vidas.
La adolescencia es una etapa difícil de la vida, ya que es una etapa donde deja de ser niño y empezar a ser adulto. Una buena alimentación durante este tiempo usualmente genera dificultades por la adopción de una personalidad más independiente y por sus patrones de alimentación social. Además otro tema que compete no solo al nutriólogo, sino además al psicólogo es la preocupación que tienen las y los adolescentes por su imagen corporal, que condiciona dietas restrictivas para acercase a un ideal de belleza, influenciados por modelos sociales del momento, teniendo el riesgo de serios trastornos de la conducta alimentaria. En especial, los adolescentes tienen necesidades nutricias marcadas por procesos de maduración sexual, aumento de talla y peso, aumento de masa corporal y masa ósea, por lo que requiere una mayor cantidad de energía y nutrimentos.
En la etapa adulta las necesidades nutricionales de las personas son estables, ya que el crecimiento de ha detenido. En la edad adulta, una alimentación adecuada es necesaria para conservar la buena salud, lograr productividad en el trabajo, evitar enfermedades como sobrepeso, obesidad o las comorbilidades de éstas y retardar o disminuir el deterioro conforme avanza la edad y así prepararse para vivir de la mejor manera la etapa de adulto mayor.
De la misma manera al llegar a la edad adulta es necesario mantener una buena alimentación; variada, completa, suficiente, adecuada, higiénica y equilibrada. Para evitar enfermedades disminuir los síntomas de los padecimientos propios de la edad y vivir una etapa plena.
Si quieres informarte sobre
- Antecedentes
- Marco jurídico de la Nutrición
- Marco normativo
- Políticas públicas sobre la nutrición en México
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- Panorama epidemiológico en el mundo
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- La nutrición en Puebla
- Importancia y participación del nutriólogo.
- Nutriólogos en servicio en el Estado.
- Funciones que desempeña el nutriólogo en favor de la población.
- Nutriólogo en la práctica clínica
- Nutriólogo en la promoción a la salud
- Nutriólogo en el deporte
- Nutriólogo en el servicio de alimentos
- Nutriólogo en el área de Enfermedades Crónico No Transmisibles
- Nutriólogo en el área de Infancia y Adolescencia
- Nutriólogos apoyando la Estrategia Integral de Atención a la Nutrición “EsIAN”
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- Día Nacional del Nutriólogo (pdf)
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