La salud bucal es el estado óptimo de tu boca y las estructuras que la componen, hueso, encía, dientes, lengua, músculos, papilas, venas, nervios y arterias. |
Se considera una boca sana cuando tus encías y dientes están libres de placa dentobacteriana y no tienen caries, además la lengua, la mucosa y las glándulas salivales cumplen con todas sus funciones, debes tener presente que el color de tus encías y mucosa debe ser rosa pálido y las encías deben tener apariencia de cáscara de naranja, con puntos.
La placa dentobacteriana es la acumulación de restos de comida, bacterias y saliva que se pega a la estructura de los dientes, esta placa debe ser removida con el cepillado.
La caries es una enfermedad que ataca la estructura del diente, son bacterias que se pegan al diente y lo destruyen en una forma progresiva, es contagiosa y es necesario eliminarla para que tus dientes estén sanos y no se complique con padecimientos degenerativos, ya que cuando la caries no se atiende oportunamente, puede afectar órganos como el corazón, las articulaciones, los pulmones, incluso el cerebro.
¿Qué debes hacer para tener una buena salud bucal?
Debes asistir por lo menos dos veces al año al dentista, si estás embarazada o tienes algún padecimiento crónico degenerativo (diabetes, hipertensión, VIH, artritis, problemas del corazón), es recomendable que asistas cada tres meses a consulta dental.
Es necesario que te cepilles tres veces al día con una buena técnica de cepillado y con tiempo suficiente para poder limpiar toda la boca, la lengua se cepilla también, muchos cepillos tienen un limpiador de lengua en la parte posterior, pregúntale a tu dentista qué cepillo es el adecuado para ti.
De preferencia cepilla tus dientes con pasta dental con flúor, esto ayudará para que tus dientes se fortalezcan y así podrás evitar que la caries ataque tus dientes. Reemplaza tu cepillo cuando las cerdas estén dobladas o cada dos meses. Además del cepillado es necesario utilizar el hilo dental dos veces al día para eliminar los restos de comida que puedan quedarse entre los órganos dentales, es mejor si utilizas un hilo que no contenga cera.
Para ayudar a tu buena salud bucal, modera el consumo de alimentos azucarados: dulces, refrescos etc. Sustituye estos por alimentos naturales como frutas y verduras, carne huevo etc.
Recuerda que los dientes no sólo te sirven para comer, también ayudan a que te veas bien y que puedas expresarte y hablar de una forma correcta. En el caso de los niños es primordial que cuiden sus dientes aunque sean de “leche o primarios”, ya que estos servirán como guía de erupción para los dientes permanentes que estarán en la boca de por vida.
Si detectas alguna lesión o coloración rara en tu boca acude inmediatamente con tu dentista para una revisión, es importante que revises toda la boca cotidianamente para evitar que exista la posibilidad de tener una lesión que pueda ser maligna.
La salud bucal se refleja en todo tu organismo, cuida tus dientes y boca y así podrás tener una salud plena, recuerda que salud bucal es mucho más que dientes sanos.